Reencuentro Techero

Por: Jacky Muñoz, techera.

El sábado 11 de noviembre, estuve en el primer Reencuentro Techero. Es una alegría encontrarse con tu familia TECHO, a la que no había visto por días, meses e incluso años. Al verlos y empezar a recordar, fue como si no hubiera pasado tanto tiempo. Escuchar a techeros  decir: “¡Hey!, ¿por qué no han puesto fotos del 2003?”, “¿Se acuerdan del Correo de Brujas?”, son aventuras y anécdotas que solo quedan en recuerdos y se vuelven a revivir en este tipo de actividades. Espero que para el segundo Reencuentro Techero puedan estar los que no pudieron por alguna razón o porque no se dieron cuenta.

 

Yo empecé (como voluntaria) en agosto del 2010, en la comunidad La Cuchilla, una construcción que marcó mi vida y la de mi familia; con la camiseta azul, que en ese momento se llamaba Un Techo para Mi País, que aun la tengo y la utilizó mi hijo para ir a una ECO hace un año. No se imaginan la emoción que me generó el verlo con mi camiseta, haberle transmitido ese sentido de pertenencia para con TECHO, haberlo motivado, desde mi sentir, a dejar todo de él mismo al momento de ir a las comunidades y escucharlas.

 

Los que hemos sido techeros hemos ido a construcciones, ECOs, ENV, Colectas y Mesas de Trabajo en las comunidades, sin importar el clima ni las distancias. Hay muchos que han estado por muchos más años que yo y no se imaginan cuánta admiración siento por ellos y por los nuevos voluntarios. El TECHO llegó a ser su primer hogar, porque lejos de regresar a nuestras casas, al terminar cada construcción, el compromiso seguía, porque había que dejar todo en orden después de entregar a cada familia su nuevo hogar.

 

Podrán decir que no cambiamos vidas, pero si tocamos corazones; el nuestro y el de las familias, que con toda la confianza nos permiten entrar en sus hogares para construirles un lugar adecuado donde vivir.

 

Sigamos trabajando para que todos podamos algún día, disfrutar de una sociedad más justa y sin pobreza.

 

Que ese vínculo que tenemos con TECHO no se pierda y mucho menos se rompa. Podemos seguir apoyando con todas las actividades que realizan las nuevas generaciones de techeros, que con el mismo amor y emoción con los que nosotros íbamos a cada comunidad, hoy por hoy lo hacen ellos, a nosotros solo nos queda apoyarlos, y lo podemos hacer por medio del Programa de Socios, dentro de nuestras posibilidades.

 

Recordemos que, ¡también se construye donando!